5 Claves para gestionar la RSC en la nueva realidad
La nueva realidad ha transformado de manera significativa en las expectativas de la sociedad y, por lo tanto, ha impuesto un cambio en la manera de afrontar la RSC desde las compañías para adaptarse las nuevas prioridades de las comunidades.
Hace solo unos meses celebramos desde ATREVIA una sesión online con el objetivo de definir algunas de las claves fundamentales que, en esta dirección y en línea con su propósito, tendrán que implementar las organizaciones para adaptarse a este contexto post COVID-19.
El encuentro, que sumó casi 300 participantes, contó con las intervenciones de Alberto Andreu, senior advisor de ATREVIA y profesor de la Universidad de Navarra; Manuel Sevillano, director de RSE y Reputación de ATREVIA, y Asunción Soriano, CEO de ATREVIA.
La introducción del evento la asumió Asunción Soriano, que retrocedió hasta 2014 para señalarlo como el año en que se afianza el concepto de sostenibilidad, entonces centrado en la dimensión social pero también abarcando el cuidado del entorno. En aquella fecha, el debate se enfocaba hacia la posible necesidad de crear un nuevo contrato social. Con la irrupción de la COVID-19, el punto de partida de la RSC no puede ser el mismo. El ejercicio de reflexión está servido.
Alberto Andreu tomaba a continuación la palabra para lanzar la siguiente cuestión: ¿Perderemos, a raíz de esta situación, lo que habíamos ganado hasta la fecha? Lo más efectivo, comentó, es reconducir esta idea hacia la predicción, cada vez más segura, de que la RSC crecerá en todas sus facetas, aunque las prioridades se vean afectadas, confirmándose como una palanca de crecimiento y recuperación. A propósito de esas nuevas prioridades señaladas, Andreu no dudó en destacar: la salud, el impacto social y la digitalización, que emergen como los temas con mayor crecimiento para la reconstrucción postcovid.
En este sentido, las tareas del responsable de RSC en las empresas se va a ver también alterada, ya que aparecen otros temas como son la identificación y mitigación de los riesgos no financieros. Ahora, más que nunca, cobra importancia el saber interpretar y responder a las nuevas necesidades, tener la capacidad de innovar y desarrollar una marcada visión de futuro, además del aprendizaje continuo, así como de búsqueda de oportunidades y, por supuesto, la iniciativa. “Esto ya no va de comunicar. Va de rendir cuentas. Dije, me comprometí, e hice”, declaró el senior advisor de ATREVIA.
Por su parte, Manuel Sevillano se ocupó de enumerar cinco acciones que las organizaciones deben asumir para lograr la adaptación necesaria a esta nueva realidad. A modo de conclusión, los pasos que toda empresa debe tener en cuenta en el contexto actual se resumen en:
1. Que es el momento de buscar puntos de coincidencia entre las empresas y la sociedad -de una forma proactiva por parte de las empresas, ya que pueden ser parte de la solución al problema.
2. Hay que pasar de una gestión de crisis basada en la comunicación del storytelling, a una gestión de riesgos reputacional, poniendo al stakeholder en el centro de la estrategia.
3. Se debe priorizar la gestión personalizada del stakeholder, según los intereses y compromisos.
4. No podemos olvidar reforzar nuestro compromiso con los grupos de interés acorde a nuestra línea empresarial.
5. Y, por último, conviene transitar de la publicación de memorias de sostenibilidad a la rendición de cuentas que explique en qué punto está el grado de cumplimiento del compromiso con los grupos de interés.
5 Claves para gestionar la RSC en la nueva realidad