Entre históricos avances del S&P 500 y nuevas tensiones comerciales
En Estados Unidos, el S&P 500 avanza hacia un hito histórico al encaminarse hacia ganancias consecutivas del 20% anual por primera vez en este siglo, impulsado por un panorama económico resiliente y expectativas de recuperación sostenida. Las decisiones corporativas también dominan la atención: Intel ha asegurado una adjudicación de hasta 7,900 millones de dólares para construir una planta de chips, mientras que Rivian Automotive obtuvo un préstamo federal preliminar de 6,600 millones para su planta de vehículos eléctricos en Georgia. Además, Amazon continúa fortaleciendo su presencia en inteligencia artificial con una inversión adicional de 4,000 millones en Anthropic.
En el ámbito geopolítico, Donald Trump anunció un plan agresivo para implementar aranceles del 25% a productos de Canadá y México, así como un 10% a los bienes chinos. Estas medidas, junto con promesas de reformas energéticas centradas en combustibles fósiles y exportaciones de gas natural, generan incertidumbre en los mercados, con caídas significativas en el yuan, el peso mexicano y el dólar canadiense.
En Europa, el Banco Central Europeo enfrenta una encrucijada con señales de inflación persistente en salarios y servicios, destacadas por Rehn, quien anticipa una recuperación económica gradual pero lenta. De Guindos alerta sobre riesgos geopolíticos y comerciales derivados de la política estadounidense, mientras que Centeno subraya que el estancamiento económico actual es el costo de combatir la inflación. Los débiles datos del PMI en la eurozona refuerzan las expectativas de un recorte de tasas de hasta 50 puntos básicos en diciembre, lo que sugiere un enfoque más agresivo del BCE para estimular el crecimiento. En Alemania, el PIB apenas creció un 0.1% en el tercer trimestre, mientras que el índice IFO de clima empresarial cayó a 85.7, subrayando la fragilidad de la mayor economía de la región. Mientras tanto, las conversaciones de alto el fuego entre Israel y Hezbolá avanzan, con el Gabinete de Seguridad de Israel programado para votar sobre el acuerdo en los próximos días, lo que podría reducir las tensiones en Medio Oriente.
Asia presenta un panorama diverso. Japón continúa trasladando costos a los consumidores al ritmo más rápido desde 1992, reflejado en un aumento del 2.9% en el índice de precios al productor de servicios en octubre. El Banco de Japón mantiene una postura cautelosa en cuanto a cambios en las tasas de interés, mientras que el gobierno aprueba un paquete de estímulo de 89,700 millones de dólares para mitigar el impacto del aumento de precios en los hogares. China, por su parte, mantiene estable su tasa de interés a un año en un intento por estabilizar el yuan tras la victoria de Donald Trump. Las exportaciones chinas alcanzan niveles récord, pero las tensiones comerciales con la UE persisten ante la falta de avances en un acuerdo para evitar aranceles a los vehículos eléctricos. Nueva Zelanda muestra un repunte en sus exportaciones, impulsadas principalmente por productos lácteos, mientras que el Banco de la Reserva de Nueva Zelanda se prepara para recortar las tasas en 2025.
En el ámbito energético, Irak, Arabia Saudita y Rusia subrayan la importancia de la estabilidad en los mercados petroleros, mientras que Azerbaiyán sugiere que la OPEP+ podría renovar los recortes de producción en la reunión del 1 de diciembre. En el frente corporativo, Volkswagen ha reducido su participación en Northvolt, y Starbucks enfrenta un ataque de ransomware que afecta a un proveedor de software clave. En un panorama global marcado por políticas proteccionistas, incertidumbre geopolítica y la lucha por la estabilidad económica, los inversores sopesan cuidadosamente los riesgos y oportunidades en los mercados financieros. Con una mezcla de optimismo y cautela, las expectativas de recuperación dependen de la capacidad de los actores económicos y políticos para manejar las complejidades de un entorno global en constante cambio.