Surcando el cielo, desafiando límites

“Ser la primera piloto de Combate del país me hace sentir orgullosa, agradecida y comprometida en dar lo mejor de mí para influenciar de forma positiva a las nuevas generaciones. Los pilotos de combate surcamos el cielo a gran velocidad, combinando adrenalina, decisión, coraje y desafiando los límites del aire. Haber podido lograr ser la primera mujer dominicana en experimentar lo antes descrito, es realmente una experiencia maravillosa”, afirma la primera mujer al frente del Escuadrón de Combate de la Fuerza Aérea de República Dominicana, la Teniente Coronel Piloto María Alejandra Tejeda.

Ingresó como cadete a la Academia Militar Batalla de las Carreras en el año 2002 y pertenece a la primera promoción de mujeres cadetes en la historia de las Fuerzas Armadas Dominicanas, graduándose en diciembre 2005 como Segundo Teniente Licenciada en Ciencias Militares y Aeronáuticas, otro hito dentro del mundo castrense.

En junio del año 2005 inició sus estudios en la Escuela de Aviación de la Fuerza Aérea de República Dominicana y terminó su entrenamiento de Piloto Aviador en 2007. Luego, continuó capacitándose  y adquiriendo más experiencia en el área de aviación tanto en el país como en el exterior.

La Teniente Coronel Tejada cree que la preparación, disciplina y perseverancia son la base fundamental para lograr lo que sea que nos propongamos en la vida. “Sobresalir, rompiendo paradigmas y estereotipos en un ambiente eminentemente masculino se puede lograr demostrando que estamos capacitadas para desempeñar cualquier función en la que se nos designe, las oportunidades van a llegar, lo único que hay que hacer es prepararse para cuando nos toque”.

Formarse en la carrera militar precisa de un marcado carácter vocacional. “Decidir pertenecer a las Fuerzas Armadas por vocación y no movido por algún otro interés personal, es la garantía para poder crecer, superando el sin número de obstáculos que se van a presentar en el camino. Cuando eliges una profesión u oficio por vocación no te rindes por difícil y complicada que parezca la meta. Entender que hay que continuar luchando por lo que queremos aun con dudas, sin permitir que esas dudas nos paralicen nuestro accionar, creo que es mi mayor aprendizaje”.

Como militar activa, piloto de combate de la Fuerza Aérea de República Dominicana, María Alejandra ha asumido el compromiso de defender el espacio aéreo dominicano, sin importar las amenazas. “Representar y servir al país en cualquier circunstancia, es y será siempre nuestra misión principal”, concluye.   

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